Una gran proporción de carcinógenos conocidos se encuentran en ambientes de trabajo.
En principio, las exposiciones ocupacionales pueden ser controladas, minimizadas o eliminadas.
En términos de salud pública, los carcinógenos ocupacionales son muy importantes por el potencial de prevención.
La prevención debe tender a la disminución o eliminación de los riesgos.
La Agencia Internacional de Investigación del Cáncer IARC
Clasifica las sustancias en 4 grupos:
Grupo 1: Procesos industriales, compuestos químicos o grupos de los mismos que son cancerígenos para el hombre.
Grupo 2: Este grupo se subdivide en dos:
2A Probablemente Cancerígenos
2B Posiblemente Cancerígenos
Grupo 3: Productos que no pueden clasificarse como cancerígenos para el hombre.
Grupo 4: Probablemente no cancerígenos para los humanos.
Tumores que han sido asociados más frecuentemente con un origen ocupacional (mayoritariamente industrial):